Entrega trofeo ganador Trivial segundo trimestre

El pasado 27 de Abril, coincidiendo con la Jornada Novedades en Voleibol, se entregó el trofeo al ganador del segundo trimestre de nuestro Trivial, Andrés Manuel Cabello Pérez, de la XI promoción. Hizo entrega del trofeo Juan Fco. Oliver Coronado, Vicepresidente de la Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid. Enhorabuena Manolo.

                                         

Trofeo recuerdo INEF

La organización de distintos concursos y actividades que hacemos en la Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid nos lleva a una constante búsqueda de trofeos para los ganadores y ponentes. A nuestro proveedor habitual le pedimos presupuesto del trofeo que veis en la foto.

Visto el resultado, y atendiendo a la petición de algún socio, se nos ocurrió poder ofrecérselo a nuestros compañeros, para que lo tengan como recuerdo de nuestro paso por el INEF de Madrid.

Se trata de un trofeo realizado en metal, de color gris oscuro, y con peana de madera. Mide 23 centímetros de alto, y en la placa iría el escudo del INEF, el nombre y los apellidos, la promoción a la que se pertenece, y los años de comienzo y finalización de los estudios. Aproximadamente, como se ve en la foto.

Los interesados en tenerlo mandad correo a antiguosalumnosinef@hotmail.com

Jornadas “Las mujeres en las profesiones del deporte”. 4 y 5 Abril 2019

Presentación.

El deporte constituye hoy un ámbito de desarrollo profesional y social con importantes connotaciones políticas, comerciales y personales que requieren de la actuación de diferentes profesionales y cada vez más especializados. Así encontramos que alrededor del deportista se mueven diversas profesiones; unas actúan directamente en el desarrollo y logro deportivo, como es el caso del personal técnico-deportivo; otras tienen una función organizativa y directiva que posibilita el hecho deportivo y, también las hay que se ocupan de aplicar el conocimiento de las ciencias Biomédicas al mejoramiento de la práctica y a la consecución de mejores condiciones y resultados: Medicina, Biomecánica y Fisioterapia. Por otra parte, las ciencias del comportamiento humano que tratan el hecho deportivo, como la Sociología, la Psicología o la Comunicación, ofrecen un amplio campo de desarrollo profesional para analizar y difundir el fenómeno deportivo y lograr un mayor impacto personal, social y económico.

Las mujeres se han ido incorporando paulatinamente al deporte a lo largo del pasado siglo XX y son varios los sectores profesionales en los que actualmente participan. No obstante, su tardía incorporación y el marcado carácter sexista que sigue presente en el quehacer deportivo, sitúan a las mujeres en un plano desigual y en muchos casos desconocido en cuanto a su participación y acceso a las profesiones del deporte.

La Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte-INEF de la Universidad Politécnica de Madrid y el Seminario Mujer y Deporte, conscientes del interés que tienen las profesiones que se relacionan con el deporte en la sociedad actual y del papel que las mujeres vienen realizando en el desarrollo de los distintos campos científicos, tecnológicos y sociales que inciden en el desarrollo de las ciencias del deporte, organiza unas Jornadas que recojan las diferentes perspectivas profesionales del ámbito deportivo y la incidencia y logros de las mujeres en los distintos sectores, destacando la aportación de algunas mujeres cuyo esfuerzo y trabajo pueda ser un referente profesional y deportivo para las niñas y las jóvenes de las nuevas generaciones.

Estas Jornadas se enmarcan en un proyecto más amplio que incluye otras actividades específicas, sobre algunos de los ámbitos profesionales que aquí se tratan, y la Exposición ¡A POR TODAS!, de carácter itinerante, que será inaugurada en el próximo mes de septiembre coincidiendo con la Semana Europea del Deporte.

Objetivos:

  • Analizar la participación de las mujeres en las distintas profesiones del ámbito
  • Conocer y difundir la situación deportiva y laboral de las mujeres que se dedican profesionalmente al
  • Visibilizar a las mujeres como profesionales en los diferentes ámbitos del
  • Difundir la perspectiva científica y profesional del
  • Promover el interés de las niñas y las jóvenes por los Estudios de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte y por las profesiones que se desarrollan en torno al deporte.

Avance de Programa:

Jueves, 4

09.30  Apertura y Presentación. Rector UPM, Secretaria Estado CSD, Subdirector General de Programas del IMIO, Decano Fac. CCAFyD (INEF), Presidenta Seminario Mujer y Deporte.

10.00  Ponencia: La participación de las mujeres en las profesiones del deporte. Dña. Benilde Vázquez, Vicepresidenta Seminario Mujer y Deporte-INEF Madrid.

10.45  Ponencia: ¿Cómo puedo ser profesional en el ámbito deportivo? Dña. Élida Alfaro, Presidenta Seminario Mujer y Deporte-INEF Madrid.

11.30 CAFÉ

12.00 Mesa redonda: El deporte como profesión. Coordina: Dña. Maite Gómez, Profesora Fac. CCAFyD (INEF) UPM. Participan: Dña Ana Burgos, Triatleta olímpica; Dña. Gema Hassem.Bey, Medallista paralímpica; Dña. Marta Figueras-Dotti, Presidenta Ladies European Tour y Entrenadora de Golf; Dña. Elena Contreras, Árbitra Comité Madrileño de Arbitraje, y Dña. Alicia Martín, Presidenta COPLEF MADRID.

13.30 Ponencia: Perspectiva socio-laboral de las mujeres en las profesiones deportivas. Dña. María José López, Co-directora del Departamento Jurídico de AFE, Abogada especialista Derecho Deportivo.

14.15 COMIDA

15.30 Ponencia: Las mujeres en las Facultades de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. D. José Manuel García, Pte. Conferencia Española de Decanos Fac. CCAFyD.

16.15 Mesa Redonda: Ser profesional en el ámbito deportivo ¿por qué si, por qué no? Coordinan: Dña. Silvia Ferro, Profesora E. Física IES Miguel de Cervantes, y  Dña. Mª José Camacho. Profesora Fac. Educación UCM Participan: Alumnas de Educación Secundaria y Bachillerato, IES Miguel de Cervantes, Alumnas Grado Ed. Física UCM, y alumnas Grado CCAFyD (INEF) UPM.  

17.30 CAFÉ

18.00 Mesa Redonda: Las mujeres como profesionales en la dirección y gestión deportiva. Coordina: Dña. Nuria Garatachea, Subdirectora Mujer y Deporte-CSD. Participan: Dña. Milagros Díaz, Vicepresidenta FAGDE y Presidenta Círculo Gestores Deportivos Madrid, Dña. Mercedes Coghen. Exdirectora General de Deportes Ayuntamiento de Madrid, Dña. Noelia Florín, Patrocinio IBERDROLA, Dña. Carlota Castrejana, Secretaria General Fed. Española Atletismo, y Dña. Fe Robles. Presidenta Comité Fútbol Femenino. AFE.

19.30        FINALIZA LA SESIÓN.

Viernes, 5

09.30 Mesa Redonda El desarrollo profesional de las mujeres en las Ciencias sociales aplicadas al deporte.      

Coordina: D. Antonio Rivero. Profesor Fac. CCAFyD (INEF) UPM. Participan: Dña. Obdulia Tejón, Psicóloga Deportiva; Dña. Pilar Martos, Presidenta AEISAD; Dña. Emilia Fernández, Catedrática Fac. Educación-UCM;  Dña. Mercedes Sánchez, Abogada y Vicepresidenta del Tribunal del Deporte de la Comunitat Valenciana, y  Dña. María José Pascual. Directora Instalación Deportiva Vallehermoso GO-FIT.

11.00 CAFÉ

11.30 Mesa Redonda: Información y Comunicación deportiva. Perspectiva profesional para las mujeres.

Coordina: Dña. Lucía Santiago. Deportes Agencia EFE. Participan: Dña. Raquel González, RTVE; Dña. Ana José Cancio, RNE; Dña. Laura Marta, Deportes Diario ABC, y Dña. Rocío Sáez, Representante de Deportistas.

13.00 Mesa Redonda: El ámbito profesional de las Ciencias Biomédicas y la participación de las mujeres.

Coordina: D. José Luis Terreros. Director AEPSAD Participan: Dña. Ana de Torre, Medicina Deportiva Fed. Española de Fútbol (1ª división); Dña. Amelia Ferro, Profesora Fac. CCAFyD (INEF) UPM; Dña. Blanca Crespo, Fisioterapeuta Deportiva Club Rayo Vallecano, y Dña. Marcela González-Gross. Catedrática Fac. CCAFyD (INEF) UPM.

14.30 CONCLUSIONES y CLAUSURA.

DIRECCIÓN Y COORDINACIÓN:

Dña. Elida Alfaro Gandarillas, Dña. Benilde Vázquez Gómez, y Dña. Maite Gómez López.

LUGAR: Sala Internacional. Facultad de C.C. de la Actividad Física y del Deporte (INEF). C/ Martín Fierro, 7. (Ciudad Universitaria) 28040-Madrid

SECRETARÍA: Mª Jesús Morón. Tlf.: 91 0677804 / email: mujerydeporte.inef@upm.es INSCRIPCIÓN: Gratuita. Hasta completar aforo. Formulario Inscripción.

Para alumnado de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF), se reconoce 1 Crédito ECTS como Actividad Acreditable del Catálogo Específico. Para la obtención de dicho crédito, se deberá entregar un trabajo sobre la temática expuesta en las Jornadas y asistir como mínimo al 80% de las Jornadas.

 

 

Jornada “Novedades en… Voleibol”. 27 Abril 2019

La Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid organiza la jornada de “Novedades en… Voleibol”. Se desarrollará el próximo sábado 27 de Abril de 2019, en el Aula Magna del INEF. Para ésta jornada, además, hemos previsto la imposición de la insignia del 50 aniversario del INEF a todos los alumnos, presentes  e inscritos, que realizaron o estén realizando la Maestría de Voleibol.

El público a quien va dirigido el acto está formado por actuales y pasados alumnos del INEF de Madrid, profesores y alumnos de otras Facultades de Educación Física, de Escuelas de Magisterio, Institutos y Colegios que imparten TAFAD, entrenadores, jugadores y aficionados.

La actividad es acreditable con 0’5 créditos ECTS, para estudiantes de UPM inscritos.

Para ésta Jornada se aplican los siguientes precios por inscripción:

-socios de la Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid: gratis.

-colegiados COPLEF, entrenadores y jugadores con licencia de la RFEVB, alumnos de cualquier centro de enseñanza, y jubilados: 12 €

-público en general: 24 €.

-precio especial para actuales alumnos del INEF-UPM: 6 €.

Para acogerse a los descuentos establecidos es preciso aportar documentación oficial que lo justifique (matrícula, carnet,…). Las inscripciones deben ir acompañadas también del justificante de pago.

Hay que ingresar o transferir a nuestra cuenta del Banco de Santander, ES96-0049-0554-36-2210668444, el importe de la misma.

Para inscribirse, basta enviar un correo a antiguosalumnosinef@hotmail.com,  indicando a su vez si se realizó o no la maestría de Voleibol en el INEF de Madrid, y aportando el justificante de ingreso y el documento acreditativo del descuento, si lo hubiera. También en el teléfono 609 098 492.

Contamos con la colaboración de la Real Federación Española de Voleibol, del COPLEF de Madrid, y del Departamento de Deportes de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, INEF-UPM. Y por descontado, seguimos contando con la colaboración y el apoyo inestimable del propio INEF, y del Consejo Superior de Deportes.

La comida se llevará a cabo en el comedor del Restaurante INEF. Aquellos inscritos que deseen utilizar éste servicio, lo comunicarán al tiempo que se inscriben, y pagarán 10 € el mismo día de la jornada. Ese día se les dará a todos el ticket correspondiente. Importante: el servicio de comedor es exclusivamente para los inscritos en la Jornada “Novedades en… Voleibol”.

Al finalizar la jornada, sobre las 20’00 h., realizaremos nuestro homenaje y reconocimiento al Profesorado pasado y presente del INEF de Madrid en la materia de Voleibol, y posteriormente haremos entrega de la insignia del 50 aniversario a todos los alumnos, presentes e inscritos, que realizaron o realizan la Maestría de Voleibol.

No se admiten inscripciones grupales; la inscripción es individual. Y la entrega de insignias es personal, no entregándose ninguna insignia a alguien que no se inscribió en su momento, y a alguien que no está presente en el acto.

Las inscripciones tanto para la jornada como para la comida se realizarán hasta una semana antes del evento; es decir, hasta el 21 de Abril. Con posterioridad a esta fecha no garantizamos la asistencia a la jornada ni a la comida.

De no llegar a un mínimo de 50 inscripciones, lamentablemente se cancelará la jornada y se pospondrá para otra fecha.

Os pedimos la mayor difusión del evento, no sólo para participar en él, sino también para localizar al mayor número de alumnos que realizaron la Maestría de Voleibol en el INEF de Madrid.

 

Las mujeres y el deporte

El avance social de las mujeres a lo largo del pasado siglo XX ha estado marcado por su incorporación a ámbitos en los que su presencia había sido inexistente o marcadamente minoritaria, como es el caso del ámbito deportivo.

Aunque se han dado ya pasos muy importantes hacia la igualdad de género y en los países más desarrollados se ha logrado incluirlo como un derecho social; sin embargo, sigue existiendo una brecha todavía importante entre lo legal y lo real. El derecho sólo es un permiso de acceso pero este no garantiza que hombres y mujeres tengan las mismas condiciones personales y socio-familiares para poderlo ejercer.

Los estereotipos sociales de género y determinados tópicos sexistas todavía existentes continúan influyendo en la conducta de hombres y mujeres y condicionan la efectiva igualdad entre sexos, tanto en el ámbito del desarrollo personal como en el laboral y profesional.

Es difícil eliminar del tejido social conductas sexistas instaladas miméticamente en el comportamiento personal e institucional de la población adulta a través de la cultura, la familia, la escuela, los medios de comunicación, etc. Por ello, las políticas y acciones que se han ido incorporando con fines de lograr la igualdad entre sexos no acaban de calar en la población, incluso ni en las sociedades más avanzadas.

Las actividades físicas y el deporte históricamente han estado determinados por los estereotipos sociales de género y tradicionalmente adscritos al modelo social masculino, lo que ha condicionado y todavía continúa condicionando la relación de las mujeres con las diferentes esferas y niveles del deporte.

Los datos con los que contamos actualmente revelan diferencias cuantitativas y cualitativas importantes respecto de la participación de la población femenina en el deporte. Así encontramos que, exceptuando el deporte olímpico en el que existe prácticamente paridad de participación y de éxitos, en los demás ámbitos deportivos perduran las desigualdades.
La brecha de género en la práctica deportiva de la población española ha estado establecida en 18 puntos porcentuales desde 1980 hasta 2010. Aunque el Anuario de Estadísticas Deportivas 2016 señala que las diferencias han descendido hasta un 8%, es todavía una realidad que las mujeres no sólo participan en menor medida sino que, además, lo hacen en modalidades y niveles asociados a los estereotipos de género; también, que el abandono de la práctica en la adolescencia es mayor en mujeres que en hombres.

El deporte federado presenta igualmente grandes desequilibrios. En el total de federaciones deportivas, las fichas femeninas sólo son el 20,3% y los estereotipos de género se hacen sentir también cuando deportes tradicionalmente feminizados, como Gimnasia y Voleibol, son los que aglutinan un mayor número de mujeres.

En el ámbito de la gestión y dirección técnica del deporte existen aún mayores diferencias. La participación de mujeres en los órganos de gobierno federativos no alcanza el 15%, sólo hay tres mujeres que ocupan el cargo de Presidenta de Federación (Vela, Remo y Salvamento y Socorrismo) y en el total de Juntas Directivas la proporción de mujeres es del 2,6%. Asimismo, en los órganos de gestión del Comité Olímpico Español encontramos tan sólo una participación femenina del 17,2%. Una situación parecida hallamos entre el personal técnico-deportivo de alta competición, compuesto por un 14% de mujeres y un 86% de hombres.

Desde 1990, diversos organismos nacionales e internacionales han promovido iniciativas orientadas a mejorar la situación de las mujeres en el deporte mediante la incorporación de la perspectiva de género en los diferentes estamentos deportivos. En el ámbito internacional destacan las Directrices de la Unión Europea (2003), las acciones emprendidas en 1994 por el Grupo de Trabajo Internacional (IWG), las del Comité Olímpico Internacional (1996) para promover acciones en los Comités Olímpicos nacionales y en las Federaciones deportivas y, más recientemente, las de ONU (2015) destacando el papel del deporte en la consecución de la igualdad entre mujeres y hombres e incluyéndolo en la Agenda de Desarrollo 2030.

A nivel nacional, el artículo 29 de la Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres (2007), contempla la obligación de aplicar en todos los ámbitos del deporte el principio de igualdad que establece la propia Ley. Además, desde los organismos deportivos, Consejo Superior de Deportes (1990) y Comité Olímpico Nacional (1998), así como desde el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades (1990), se han implementado normativas, acciones y estrategias encaminadas a la consecución de la igualdad de género en el deporte.

Si bien es cierto que todas estas acciones han dado como resultado una importante mejora de la situación de las mujeres en el deporte, el impacto ha sido desigual en los diferentes ámbitos deportivos. Como ya se ha señalado anteriormente, el ámbito más beneficiado ha sido el del deporte de alta competición y el deporte olímpico, observando un menor progreso en la práctica físico-deportiva de las niñas, las jóvenes y las mujeres adultas.

Asimismo, en la gestión y dirección técnica del deporte prácticamente no se ha producido ninguna mejora, situación que preocupa tanto a nivel internacional como nacional. Este es el motivo por el que diversos organismos están poniendo el foco de atención de futuras acciones en generar políticas y estrategias para incrementar el número de mujeres en los puestos directivos y de responsabilidad; señalando, a su vez, la necesidad de eliminar los estereotipos sociales de género que alejan a las mujeres de los ámbitos de poder.

En mi opinión, sólo a través de la educación y de políticas orientadas a introducir cambios en la forma de pensar y de hacer de las personas se puede lograr un cambio efectivo, y esa tarea les compete fundamentalmente a la escuela y a la familia.

Estas dos instituciones deberían contar con la información y la formación necesarias para liderar un verdadero cambio en relación con la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres. Hasta tanto no se activen políticas orientadas expresamente a incidir en estos campos, va a ser difícil erradicar de la conducta social y personal de la población y de las instituciones administrativas, laborales y académicas planteamientos que inducen a la discriminación.

Bajo el lema anotar puntos para la igualdad de género a través del deporte, ONU Mujeres ha establecido la hoja de ruta para alcanzar la igualdad de género para 2030, reconociendo explícitamente que el deporte es un facilitador importante para el desarrollo y el empoderamiento de las mujeres.

Mientras no haya mujeres con responsabilidades de dirección, de decisión y que sean modelos a seguir, mientras no existan juntas directivas sensibles a las especificidades de género y no se administre el deporte y la actividad física con el aporte de mujeres y hombres, no habrá igualdad de oportunidades para las mujeres y las jóvenes.

Es necesario alentar a las mujeres para que sean líderes, ello ayudará a fortalecer las políticas y las leyes orientadas a lograr una mayor igualdad entre los sexos.

Élida Alfaro
Directora Seminario Mujer y Deporte-INEF Madrid

Cursos y Campamento

Desde la Escuela de Tiempo Libre, EALYR, Escuela Oficial de la Comunidad de Madrid nº 22, adherida a nuestra Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid, queremos presentarte los PRÓXIMOS CURSOS, con descuentos especiales para socios y amigos de la Asociación. Información: escuelaealyr@gmail.com – 619405953 (Sergio Bernal).

CURSO de MONITORES/AS de Tiempo Libre 3×1Curso Oficial de Monitores/as de Tiempo Libre + Cuerdas y Circuitos + Multiaventura para campamentos, del 6 de marzo al 25 de abril de 2019. Adjuntamos también el cartel informativo. 

CURSO 2×1: Cuerdas y Circuitos + Multiaventura para campamentos. Certificado. del 12 al 15 de abril de 2019 (los 2 cursos por 190 €). Certificado por EALYR.
Las inscripciones ya están abiertas y se están cubriendo por riguroso orden de inscripción. 

MENORES EN SEMANA SANTA (14-17 de abril):
CURSO de PREMONITORES/AS de Tiempo Libre (14 a 17 años): Certificado por EALYR. Del 14 al 17 de abril de 2019. Adjuntamos también el cartel informativo. 
 
CAMPAMENTO Semana Santa (7 a 13 años): Del 14 al 17 de abril de 2019. Adjuntamos también el cartel informativo.
 
Las inscripciones ya están abiertas y se están cubriendo por riguroso orden de inscripción. 

Descuentos para socios y amigos de la Asociación (infórmate).
                                                           

Juan Algar Barrón

En la madrugada de hoy jueves ha fallecido nuestro amigo y socio de honor de la Asociación de Antiguos Alumnos, Juan Algar Barrón. Alumno de la Primera Promoción (1967-71), y Profesor de Aire libre durante muchos años en el INEF de Madrid. Tras una dura lucha contra una cruel enfermedad, nos dijo hasta luego. DEP amigo; pronto montaremos un campamento.

        

Las mujeres en la Universidad

El 8 de marzo de 1910 se autorizó, mediante Real Orden, el acceso libre de las mujeres a la universidad en España. En este tiempo han puesto de manifiesto sus capacidades y han logrado un importante avance en el ámbito académico y científico, dentro de una institución con nueve siglos de historia.

La igualdad entre hombres y mujeres es una de las piedras angulares de la democratización de las sociedades modernas y es un principio jurídico universal, reconocido en el contexto internacional por la Carta de las Naciones Unidas, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y la Convención de las Naciones Unidas sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres. Además de estos textos y compromisos internacionales sobre derechos humanos, son múltiples las leyes e iniciativas, a todos los niveles, que instan a plantear nuevas formas de pensar y actuar para hacer posible la transformación y el cambio para el logro de una sociedad más igualitaria. En los últimos años se han dado pasos significativos para la igualdad de oportunidades y derechos entre uno y otro sexo, y se han producido grandes avances en las políticas de igualdad en el marco de la Unión Europea y de las Plataformas de Acción de Naciones Unidas, pero todavía existen importantes retos relacionados con las necesidades, los intereses, los deseos y las demandas de las mujeres. Según un informe de 2008 publicado por el Instituto de la Mujer, las instituciones y la opinión pública son cada vez más conscientes de que, aunque las mujeres y los hombres sean diferentes, la desigualdad y la discriminación de género son incompatibles con la democracia.

Es innegable que a lo largo del siglo XX las mujeres han ido incorporándose a las diferentes esferas de la vida pública con gran empuje y son muchos los ámbitos en los que actualmente no sólo participan, sino que además destacan. Entre los logros obtenidos por la población femenina se encuentra el acceso a la formación y al conocimiento científico, del que estuvieron apartadas durante mucho tiempo la mayoría de las mujeres.

Las oportunidades de la población femenina en los países desarrollados para obtener formación académica y científica se han incrementado notablemente en los últimos treinta años y, hoy día, el número de mujeres matriculadas en los diferentes niveles educativos es superior al de hombres. Sin embargo, numerosos estudios de ámbito nacional e internacional sobre aspectos tales como la distribución del alumnado en las diferentes áreas científicas, el desarrollo profesional de las tituladas, los niveles laborales que alcanzan y la remuneración económica que perciben ponen de manifiesto que las mujeres, aun teniendo la misma o similar formación académica y conocimientos científico-profesionales que los hombres, no logran alcanzar los mismos éxitos que ellos.

Parece que la adscripción que determinados ámbitos profesionales y científicos han tenido y tienen al rol social masculino y la persistencia en el entramado social de los estereotipos de género más tradicionales pueden ser la causa del mantenimiento de ciertos modos de discriminación por género que todavía existen y de la lentitud con la que se están produciendo los cambios deseados.

Los roles sociales de género.

Las funciones de hombres y mujeres en la sociedad han estado determinadas por las características biológicas, el sexo, y diferenciadas por el entorno sociocultural, el género. Mientras que el sexo es una característica biológica y nos viene dado por la naturaleza, el género es una mera construcción cultural hecha según las funciones que en cada sociedad se asignan a cada sexo. Nuestra comprensión de lo que significa ser un hombre o una mujer lo aprendemos a lo largo de la vida. No hemos nacido sabiendo lo que se espera de nuestro sexo, sino que lo vamos aprendiendo de nuestra familia, de la escuela y de nuestros iguales a través de generaciones; con ello, hemos ido configurando los denominados “roles sociales de género” y, también, el conjunto de creencias que definen las características que se consideran apropiadas para hombres y mujeres, conocidas como estereotipos de género (como afirmaba Simone de Beauvoir en 1949, “una no nace mujer, sino que se hace mujer”). La función de la mujer ha estado reducida durante muchos años a la reproducción y, desde esta perspectiva, la maternidad y el cuidado de la prole y del círculo familiar han sido las tareas que han definido su rol social. En el caso del hombre, su participación en la sociedad ha estado orientada a sustentar el sistema productivo y a proporcionar medios materiales para el mantenimiento de la familia. Las culturas y las distintas civilizaciones de la historia humana han dado prioridad a las funciones que desempeñaban los hombres y han estado marcadas por el patriarcado.

Este reparto de funciones ha condicionado la vida de las mujeres a lo largo de la historia, reduciendo su quehacer al ámbito de lo doméstico y privado. Por ello, cuando han accedido al mundo público, ya sea como estudiantes, profesionales o dirigentes, se han encontrado con dificultades no sólo a nivel personal, sino también en el entorno familiar y en el ámbito sociocultural de las organizaciones.

A lo largo del siglo XX, se han producido importantes avances sociales, científicos y tecnológicos que han repercutido en cambios socioculturales de gran calado en la vida de las mujeres y han contribuido a su emancipación. Junto a estos cambios se han desarrollado suficientes apoyos legislativos que propician una sociedad más justa e igualitaria.

Formación y desarrollo personal.

La formación académica y el acceso al conocimiento científico son considerados logros esenciales en el proceso de liberalización de las mujeres. El acceso a la educación y la autonomía económica, junto al derecho al voto y al control de la propia fecundidad, han sido y son claves para que cada mujer pueda desarrollar su personalidad de acuerdo con su capacidad y sin las restricciones impuestas por la tradición, la cultura del lugar y el momento.

Aunque las mujeres siempre han estado presentes en todos los campos de la vida y por lo tanto del conocimiento, es a mediados del siglo XX cuando comienzan los historiadores a ocuparse de sus vidas y de sus trabajos. Hasta ese momento sólo encontramos en el siglo XVIII la publicación de Jerôme de Lalande Astronomía de las damas dedicada exclusivamente a las mujeres.

Clementina Albéniz en el aula de maestras / Archivo gráfíco de la Fundación Fernando de Castro

Las niñas y las jóvenes eran instruidas en el marco familiar y en actividades reconocidas como propias de mujeres. Las que pertenecían a familias acomodadas contaban con preceptores privados y lograban, en algunos casos, formar parte del grupo excepcional de “mujeres ilustres”. Sólo a partir del siglo XVII, en algunos países se les autoriza socialmente a aprender a leer y escribir y se les permite acceder a la educación elemental.

Incluso, cuando surgieron las primeras universidades, éstas asimilaron la cultura androcéntrica y misógina de su época y mantuvieron una oposición abierta a la entrada de mujeres. Así lo refleja un decreto de 1377 del Claustro de Profesores de la Universidad de Bolonia, que incluía en sus estatutos la siguiente prohibición: “Y puesto que la mujer es la razón primera del pecado, el arma del demonio, la causa de la expulsión del hombre del paraíso y de la destrucción de la antigua ley, y puesto que, en consecuencia, es preciso evitar cuidadosamente todo comercio con ella, nosotros defendemos y prohibimos expresamente que alguien se permita introducir alguna mujer, sea cual fuere ésta, incluso la más honrada, en la dicha universidad. Y si alguno lo hace a pesar de todo, será severamente castigado por el rector”.

Éstas y otras prohibiciones similares, bien de forma explícita o implícita, se mantuvieron durante mucho tiempo en el ámbito universitario. No obstante, en España se conoce la presencia puntual de alumnas en las universidades de Salamanca y Alcalá de Henares durante los siglos XV y XVI, llegando algunas a ocupar puestos docentes relevantes, como es el caso de Luisa de Medrano, Francisca de Nebrija y Beatriz Galindo. Esta última llegó a ser profesora de latín y preceptora de la reina Isabel la Católica. Posteriormente, en el siglo XVIII, María Isidra de Guzmán obtiene el título de grado de doctora en Filosofía y Letras Humanas en la Universidad de Alcalá de Henares, tras una autorización expresa del rey Carlos III.

A pesar de estos logros individuales, las mujeres todavía tuvieron que seguir sorteando normas si querían entrar en las aulas universitarias. La obligación de sentarse en la mesa del profesor, asistir a clase con un acompañante o refugiarse en un despacho en los descansos entre clases, así como las trabas para la expedición de títulos, la colegiación y el ejercicio de la profesión son algunas de las que se citan en el libro Las primeras universitarias en España, de Consuelo Flecha. También cuentan algunas biografías de Concepción Arenal que tuvo que ataviarse con una capa masculina para asistir a clase, sin matrícula ni título, en la Facultad de Derecho de Madrid (1840).

No obstante, en 1878, María Elena Maseras Ribera finaliza estudios de Medicina en la Universidad de Barcelona; y, en 1882, obtienen el grado de Doctorado en Medicina en la Universidad Central María Dolores Aleu Riera y Martina Castyells Ballespí.

Aunque a mediados del siglo XIX la educación era un derecho únicamente masculino y el 71 % de las mujeres eran analfabetas, cada vez eran más las que solicitaban permiso para realizar estudios superiores, por lo que una Real Orden de 16 de marzo de 1882 prohíbe “en lo sucesivo la admisión de Señoras a la Enseñanza Superior”; pero, el interés femenino por el conocimiento ya era imparable.

El apoyo de los krausistas.

Los movimientos pedagógicos liberales que surgieron en el último tercio del siglo XIX y principios del XX constituyeron un apoyo definitivo para la incorporación de las mujeres a la educación. Fernando de Castro (1814-1874), inspirado en el pensamiento krausista, fue uno de los defensores y promotores de la extensión de la cultura y el conocimiento a las mujeres. A poco de ser nombrado rector de la Universidad de Madrid (1868), proclama su interés por extender la cultura al pueblo por medio de la Universidad, incluidas las mujeres. Organiza las Conferencias Dominicales para la educación de la mujer (febrero de 1869), germen de la Asociación para la Enseñanza de la Mujer, y posteriormente creará el Ateneo de Señoras y la Escuela de Institutrices. Su influencia sería decisiva para la eliminación de las limitaciones que tenía la población femenina para acceder a la Universidad. En diciembre de 1869, Fernando de Castro inauguró el curso de la “Escuela de Institutrices”. Visto el éxito, pensó en consolidar la obra y dio un nuevo y más decidido paso adelante con la creación al año siguiente de la Asociación para la Enseñanza de la Mujer.

Popularmente conocida en Madrid como “Institución-Castro”, la Asociación pronto alcanzó gran éxito: en los cursos de 1882 a 1884, el conjunto de alumnas matriculadas ascendió a 851. Instalada desde 1880 en la casa número 14 de la calle de la Bolsa, desde 1892 contó con un edificio propio en la calle de San Mateo.

El filósofo, ensayista y pedagogo Francisco Giner de los Ríos (1839-1915), también seguidor del pensamiento krausista, colaborador de Fernando de Castro y, como éste, profesor de la Universidad de Madrid, fue otra de las figuras claves en el acceso de las mujeres a la educación en igualdad con los hombres. Creador de la Institución Libre de Enseñanza, en la que plasmó sus ideas pedagógicas basadas en el respeto a la persona y en una educación práctica, consideraba que la ciencia tiene una función social y que todas las personas deben poder acceder a ella.

La Institución Libre de Enseñanza abre sus puertas el 29 de octubre de 1876, en la calle de Esparteros de Madrid, y mantiene una conexión ideológica con la Asociación para la Enseñanza de la Mujer. Además, Giner de los Ríos sostuvo una fructífera relación intelectual con grandes mujeres de la época, como la escritora gallega Emilia Pardo Bazán y la penalista Concepción Arenal, ambas grandes defensoras del derecho de la mujer a la educación.

Son numerosos los escritos de Giner en los que se ocupa de la cuestión de la educación de la mujer. En ellos expone la importancia de educar a la mujer en igualdad con el hombre y defiende tenazmente la coeducación de los sexos: la Institución la impondrá en sus escuelas y colonias de vacaciones como resorte para formar el carácter moral y asegurar la pureza de costumbres. Asimismo, se mostró partidario de permitir a las muchachas seguir carreras universitarias y fue un defensor permanente de la educación de la mujer en los Congresos Pedagógicos de la Restauración. Giner fue, según Emilia Pardo Bazán, “resueltamente feminista”, pues se interesaba en alto grado por “todo lo que atañía al mejoramiento de la condición de la mujer”.

En 1915 se crea, en la calle Fortuny de Madrid, bajo la dirección de la ilustre pedagoga María de Maeztu, la Residencia de Señoritas, según el modelo de la Residencia de Estudiantes, fundada en 1910 para los hombres. Su principal objetivo era el fomento de la educación universitaria para la mujer y tuvo como función inicial albergar a las primeras estudiantes universitarias.

Estudiantes de Cambridge School. Archivo gráfico de Smith College.

El libre acceso a la universidad.

Con las ideas liberales del rector de la Universidad de Madrid, Fernando de Castro, y del filósofo y pedagogo Giner de los Ríos, que propugnaban modelos pedagógicos en los que incluían a las mujeres, y con el apoyo de un grupo encabezado por Emilia Pardo Bazán, en el que se encontraban también algunos hombres, como el jurista y filósofo José Castillejo y el propio ministro de Instrucción Pública, Julio Burell, en 1910 se da el libre acceso de las mujeres a la universidad.

En el presente año se cumple, por tanto, un siglo de la Real Orden del Ministerio de Instrucción Pública, de 8 de marzo de 1910, que, firmada por el Rey Alfonso XIII, autorizaba el acceso libre de las mujeres a la Universidad en España. Esta norma derogaba otra del mismo rango de 1888, que establecía la obligación de consulta a la Superioridad para aceptar las inscripciones de matrícula oficial o no oficial solicitadas por las mujeres.

Pocos meses más tarde, el 2 de septiembre del mismo año, se aprueba otra Real Orden, también del Ministerio de Instrucción Pública, que habilitará a las mujeres que estén en posesión de títulos académicos expedidos por este Ministerio o por los rectores y demás jefes de centros de enseñanza, para el ejercicio de las profesiones que tengan relación con el Ministerio de Instrucción Pública. Además, en esta misma norma se les otorgan los mismos derechos que a los demás opositores para el desempeño efectivo e inmediato de cátedras e incluye que estos derechos se harán constar en las inscripciones de matrícula.

El significado de estas normas adquiere una dimensión especial porque van a permitir el reconocimiento público de la formación y del saber científico de las mujeres tras el aval de un título universitario, así como su incorporación oficial a la función docente e investigadora.

Biblioteca Residencia Señoritas en Madrid / Archivo gráfico de la Residencia de Estudiantes.

La crónica de los cien años transcurridos podríamos sintetizarla en la lucha de las mujeres por incorporarse a la vida pública de pleno derecho y por alcanzar los mismos niveles de formación y de reconocimiento profesional y laboral que los hombres. En este tiempo, las mujeres han puesto de manifiesto sus capacidades y han logrado un importante avance en el ámbito académico y científico, en una institución como la universidad, que tiene nueve siglos de existencia.

La paulatina incorporación de las mujeres a las aulas universitarias, ya sin trabas burocráticas a partir de 1910, tuvo como resultado la obtención de los primeros títulos universitarios con nombre femenino dotados de pleno reconocimiento académico y administrativo.

Así, en 1914, se gradúa la primera Licenciada en Ciencias, María Sordé Xipell; la primera doctora en Ciencias (1917), Catalina de Sena Vives Pieras; la primera doctora en Farmacia (1918), Zoé Rosinach Pedrol; la primera licenciada en Derecho (1922), María Ascensión Chirivella Marín; la primera doctora en Derecho (1928), Carmen Cuesta del Muro; la primera ingeniera industrial (1929), Pilar Careaga Basabe; y la primera arquitecta (1936), Matilde Ucelay Maortúa.

A lo largo del siglo XX, y especialmente en el último tercio, se produce una incorporación creciente de mujeres a los estudios de nivel superior en España, incluido el doctorado. De tal manera que, en el curso 2009-2010, según datos de la Secretaría de Estado de Universidades, el alumnado femenino en los estudios universitarios supera al masculino (53,4 % mujeres), y del total de personas que se han graduado en el mismo periodo, el 60 % han sido mujeres. En el tercer ciclo, de las personas que han obtenido el título de Doctor/a, el 48,6 % eran mujeres. Sin embargo, cuando se analizan los datos clasificados por áreas de conocimiento y campo de estudio nos encontramos que la adscripción de mujeres y hombres es diferente. En el estudio de 2007 del MEC, Académicas en  Cifras, se recoge que las mujeres representan mayoría en Ciencias de la Salud (75%), Ciencias Sociales y Jurídicas (63,4%), Humanidades (63%), Ciencias Experimentales (58,9% ), mientras que en las carreras técnicas representan el 27,6%.

Las universidades tecnológicas, como la Politécnica de Madrid, tienen un alumnado mayoritariamente masculino. Las ingenierías, la arquitectura y el deporte continúan siendo ámbitos profesionales identificados socialmente con el quehacer de los hombres. Y, aunque unas titulaciones cuentan con mayor número de alumnas que otras, el porcentaje total del alumnado femenino, según los estudios de la UPM, es del 34,4%en los estudios de ciclo largo y 29,5%  en los de ciclo corto, datos que permanecen prácticamente invariables desde el año 2000.

Las cifras de España encuentran correlación con las que se dan en otros países de nuestro entorno sociopolítico y geográfico. En el ámbito de la Unión Europea, según datos de EUROSTAT, el porcentaje de estudiantes mujeres en el campo de la ingeniería, industria y construcción sólo sobrepasa el 30% en el caso de Dinamarca (33,3%), Bulgaria (31,1%) y Rumanía (30,4%); en el campo de las ciencias, matemáticas e informática tienen paridad de alumnos y alumnas en Italia, Portugal y Rumanía, mientras que el resto de países se mueve en torno al 30-35%. En los campos de educación, humanidades y arte, ciencias sociales y jurídicas, y salud y servicios sociales, el porcentaje de estudiantes mujeres es de dos tercios del total en la mayoría de los países.

Del análisis de estos datos se deduce que, si bien hemos superado las recias barreras que impedían el acceso de la población femenina a la formación superior, todavía se hacen patentes las influencias de la cultura y la tradición a la hora de elegir los estudios. Y este hecho está generalizado en casi todos los países de Europa, incluso en aquellos que tienen una estructura social más igualitaria, como son los casos de Finlandia o Alemania.

Asimismo, se observa la influencia de los estereotipos sociales de género en el tipo y nivel de ocupación profesional y laboral que realizan las mujeres en la universidad. El estudio Académicas en Cifras destaca que la distribución de mujeres y hombres en los diferentes niveles del personal docente está desequilibrada a favor de los hombres, siendo muy llamativo el hecho de que las mujeres que finalizan los estudios sea del 60,3% y, sin embargo, sólo el  37,9% ocupen el nivel de profesora titular y el 13,9% alcancen el de catedrática. En la UPM, las catedráticas representan el 7,9% y las profesoras titulares, el 24,8%.

La universidad, motor del cambio.

El papel de las universidades en los cambios socioculturales y económicos de los países es de gran responsabilidad. El impacto que la universidad tiene en su ámbito de actuación sobre el capital humano resulta esencial como motor para el avance de cualquier sociedad. También tiene que ver, de manera incuestionable, con la construcción de una realidad mejor en el ámbito de la convivencia, el espíritu crítico, la creatividad y, en definitiva, el bienestar a cuya extensión contribuye.

En los últimos años, en España se ha creado un marco legislativo y jurídico en materia de igualdad de los más adelantados de Europa (Ley Orgánica 1/2004 de 28 de diciembre contra la violencia de género y Ley Orgánica 3/2007 de 22 de marzo para la igual- dad efectiva entre mujeres y hombres), que constituye una herramienta funda- mental para lograr definitivamente una sociedad más justa e igualitaria.

No obstante, nuestro país se sitúa en la posición decimoséptima de la clasificación mundial en el Índice de Disparidad entre Géneros, publicado por el Foro Económico Mundial, que evalúa el buen uso y el reparto de los recursos y oportunidades entre la población femenina y masculina en áreas como salarios, niveles de participación y acceso a empleos altamente cualificados, participación política, educación, etc. Este puesto nos aleja del restringido club de los Estados europeos más paritarios.

En el ámbito universitario, a la legislación citada que establece, entre otras cosas, la prioridad y obligatoriedad de crear observatorios y unidades de igualdad en las universidades y el desarrollo de políticas activas para el desarrollo de la paridad de género hay que añadir la reciente LOMLOU (Ley Orgánica 4/2007 de 12 de abril) y el Real Decreto que establece las normas para la elaboración de los nuevos estudios de grado y posgrado adaptados al EEES (R.D. 1393/2007 de 29 de octubre), que contemplan la obligación de incluir formación con perspectiva de género en los planes de estudio.

Por otro lado, la amplia trayectoria de los Estudios de las Mujeres, Feministas y de Género, consolidados ya en casi todas las Universidades españolas, la progresión de la investigación desarrollada por estos colectivos en las últimas décadas de la que dio cuenta el Libro Blanco sobre los Estudios de las Mujeres en las Universidades españolas (1975-1991) y su posterior actualización en la obra Feminismo y Universidad, las redes internacionales desarrolladas, el interés en su fomento con la creación, en el marco del Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica, de un Programa Sectorial de Estudios de las Mujeres y de Género; en definitiva, ha dado como resultado un vasto conocimiento sobre la desigualdad, discriminación y sesgos de género que se está poniendo de manifiesto constantemente en congresos y eventos científicos y académicos.                                                           

Las instituciones universitarias, en el momento presente y ante la reforma del EEES, no pueden eludir la responsabilidad legal atribuida, pero, mucho menos, la que tienen en el ámbito científico y social. El desarrollo de programas que permitan conocer las causas de la desigualdad, buscar soluciones para lograr la igualdad de mujeres y hombres y, por tanto, una sociedad del siglo XXI más integrada y democrática, deberían ser incluidos en sus planes de calidad. Es indudable que a la Universidad le quedan todavía muchos retos por superar hasta lograr la deseada igualdad. El hipotético “techo de cristal” con el que se designan las barreras que frenan el camino de las mujeres hacia la paridad debe romperse definitivamente este siglo, y las instituciones universitarias deben liderar los cambios sociales orientados a este fin.

La igualdad entre mujeres y hombres significa la posibilidad que tienen todas las personas de desarrollar sus capacidades personales, tanto en el ámbito público como en el privado; la toma de decisiones sin las limitaciones impuestas por los roles tradicionales asignados en función del sexo; y el reconocimiento del valor de todas las aspiraciones y necesidades de mujeres y hombres.

La igualdad, además de ser un derecho de las personas, es una necesidad estratégica para avanzar en democracia y para la construcción de una sociedad más justa que permita un mayor desarrollo social y económico.

Élida Alfaro

Presidenta de la Asociación de Estudios sobre la Mujer –  UPM

Premio Nacional del Deporte 2016

 

 

De padres a hijos

Dice un dicho norteño que “de padres gatos, hijos michines”. Y es el caso de los dos compañeros ineftos que traemos hoy a nuestra web.

Jesús Tortosa Alameda (Madrid, 1964), hizo INEF en Madrid, perteneciendo a la XVII promoción (1983-88). Desde joven practicó Taekwondo, llegando pronto los éxitos. Como competidor, cabe destacar entre otros muchos triunfos, su medalla de plata en el Campeonato Mundial de 1987, la medalla de plata en la Copa del Mundo 1989 y sus 3 medallas de oro en los Campeonatos de Europa 1980, 1982 y 1988, sin olvidarnos del 4º puesto en los Juegos Olímpicos de Seúl 88.

Una vez abandonada la competición se dedicó a entrenar y dirigir, y de igual manera, también llegaron los éxitos. Es cinturón negro 8º DAN, maestro y entrenador de medallistas europeos, mundiales y olímpicos, destacando el primer puesto en la clasificación por equipos, como Director Técnico de la Federación Española de Taekwondo, en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, con una de oro y dos de plata, además de 2 medallas de bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud y 43 medallas en categoría absoluta en Campeonatos del Mundo, Copas del Mundo y Grand Prix, habiendo recibido entre otras distinciones la Medalla de la Real Orden al Mérito Deportivo del CSD, la Insignia Olímpica del COE y los premios del la Real Federación Española de Taekwondo al Mejor Deportista y al Mejor Técnico en tres ocasiones. En los Juegos Olímpicos de Río 2016 dirigió y entrenó a la Selección de Aruba, sumando así su cuarta participación olímpica. Da cursos por todo el mundo. Además, por si faltara algo, es socio de nuestra Asociación de Antiguos Alumnos del INEF de Madrid. Grande Jesús.

             

Y para hacer bueno el dicho que comentábamos al principio… Jesús Tortosa Cabrera (Madrid, 1997). Estudiante de primer curso en el INEF de Madrid. No quiso ser menos que su padre, y también comenzó desde muy joven con la práctica del Taekwondo, y como de casta le viene al galgo, también cosechó rápidamente triunfos, éxitos y medallas. Entre su amplio palmarés destacamos el bronce en el Mundial de 2017, el oro en el Mundial Junior 2014, las medallas de bronce en el Campeonato Europeo de 2014, plata en los Europeos de 2016 y 2018, los tres oros en los Europeos Sub 21 del 2014, 2015 y 2017 o el récord de nueve medallas en Grand Prix. Fue también Diploma Olímpico en los Juegos de Río 2016, medalla de Bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud Nanjing 2014, plata en los Juegos Europeos de Bakú 2015 y oro en los Juegos del Mediterráneo 2018. Es además, Premio Nacional del Deporte en 2015 y Premio 7 Estrellas del Deporte de la Comunidad de Madrid 2016.

                    

Ambos comparten algunos hitos históricos en el taekwondo mundial como es el hecho de ser los únicos padre e hijo que han competido y obtenido diploma en Taekwondo en unos Juegos Olímpicos (el padre en Seúl 88 y el hijo en Rio 2016) o haber recibido ambos el Premio de la Real Federación Española de Taekwondo al mejor Taekwondista de España, eso sí con 25 años de diferencia.

Enhorabuena Familia Tortosa. Hacéis más grande a nuestro querido INEF, y conseguís que todos los que estudiamos allí nos sintamos orgullosos de nuestros compañeros.

 

 

 

 

 

 

Entrega trofeo ganador Trivial primer trimestre

El pasado 2 de Febrero, en la Asamblea anual de socios, se entregó el trofeo al ganador del primer trimestre del Concurso Trivial, Manuel Escudero Cordón, de la 4ª promoción. Hizo la entrega del trofeo D. Vicente Gómez Encinas, Decano del INEF.

En la foto, Manolo Escudero Cordón, ganador del trofeo, y Santiago García de Cáceres, web máster del concurso Trivial.